martes, 9 de junio de 2009

Granadilla. La Concejalía de Medioambiente ofrece recomendaciones sobre las hogueras de San Antonio, San Juan y San Pedro.


Desde la Concejalía dirigida por nuestro compañero Antonio Cabrera se han lanzado una serie de propuestas para evitar los peligros que esta tradición popular puede generar para el patrimonio natural y humano del municipio, así como las fórmulas para evitar el vertido de sustancias contaminantes en el medio a través de las fogatas. A continuación les ofrecemos el comunicado de prensa ofrecido desde la Concejalía.


En los últimos años las hogueras de junio, en las que se incluyen la de San Antonio, San Juan y San Pedro, se han convertido en una tradición a la que se suma un gran número de la población. Con el objetivo de que esta celebración se desarrolle con la mayor seguridad posible, desde la Concejalía de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Granadilla de Abona que dirige Antonio Cabrera, se ofrecen una serie de recomendaciones para seguir manteniendo esta tradición sin los peligros que pudiera acarrear para la salud y el entorno natural.
Cabrera señala que hasta hace unos años se reunían materiales naturales para elaborar las fogatas, pero hoy día se utilizan numerosos objetos tóxicos que deben ser gestionados de forma correcta y nunca quemarse sin tomar las medidas adecuadas, es el caso de envases de veneno, plásticos de invernaderos, neumáticos, colchones y una amplia gama de subproductos que se amontonan a lo largo del año.
El edil argumenta que, sin duda, estas noche de fuego son las noches más contaminantes del año porque no sólo se lanzan a la atmósfera numerosos gases contaminantes, sino que creamos un aire irrespirable para los vecinos. Por todo ello, se dan una serie de recomendaciones a la hora de realizar las hogueras, siendo la primera cita en la víspera de San Antonio, el próximo viernes 12, y siguiéndoles las de San Juan y San Pedro.
Respecto a los consejos, nunca deberán situarse a menos de 15 metros de la fachada de ningún edificio, y tendrán que vigilarse el paso de las líneas eléctricas y de los coches, así como la limpieza de los setos y materiales inflamables. Aunque el procedimiento sea más lento, el fuego deberá encenderse por diferentes focos, utilizando elementos como el papel, nunca gasolina ni otro líquido inflamable. Hay que evitar hacer fuego cuando hace viento; no deben hacerse hogueras de gran tamaño y deben cuidarse los materiales que se incendian. Otra de las recomendaciones es que hay que vigilar la hoguera hasta que quede del todo extinguida y mojar las brasas para asegurarse de que se ha apagado correctamente