martes, 31 de marzo de 2009
Candelaria. Sí se puede rechaza la falsa participación en la votación popular en el concurso para remodelar la Plaza de la Patrona
La considera una “tomadura de pelo” a la ciudadanía y un insulto hacia los conceptos más básicos de la participación ciudadana.
Según manifestó la portavoz de esta formación en Candelaria Mayca Coello González aunque estamos de acuerdo y nos alegramos de que se realice una consulta popular sobre este importante tema, en absoluto estamos conformes con las formas que se han seguido para lograrlo.
El Comité Sureste de Alternativa Sí se puede por Tenerife considera que es obligación de las Administraciones Públicas implicadas facilitar a la ciudadanía interesada, el acceso a la información, la comprensión de los contenidos y disponer de tiempo suficiente para estudiar y entender claramente los proyectos presentados.
En este sentido la agrupación de izquierdas ha detectado varias deficiencias en las formas en las que se ha desarrollado esta votación popular. Por un lado es evidente la falta de interés de las Administraciones a la hora de difundir esta consulta, ya que muy pocos de los vecinos y vecinas de Candelaria la conocían, mucho menos en el resto de la Isla y, más sorprendente aún, no lo sabían algunos de los equipos de arquitectura que debían defender sus proyectos, manifestó Mayca Coello.
Para Sí se puede, la mayoría de las personas que venimos a esta consulta popular no somos especialistas en arquitectura, por lo que es poco probable que podamos entender proyectos técnicos tan complejos. Es obligación de la administración facilitar a los vecinos y las vecinas la comprensión de los mismos, por un lado poniendo personal especializado para ayudar a la interpretación y, por otro, invitando a los equipos redactores de cada proyecto a presentar resúmenes fácilmente comprensibles por la mayoría de la ciudadanía”
Asimismo consideramos que el tiempo de exposición al público de los proyectos es increíblemente corto y manifiestamente insuficiente. Con solamente dos días parece difícil que se puedan entender 17 propuestas con seis paneles cada una de ellas. Por último, entendemos que ubicar esta exposición en la sacristía de la Basílica de Candelaria, unido a la desinformación mencionada, y al ser un destino eminentemente religioso, provoca que muchas personas que pueden estar interesadas en votar ni siquiera se hayan enterado de esta posibilidad.