La Inquisición, es sin duda uno de tantos ejemplos paradigmáticos de la injusticia y arbitrariedad humana. Una persona anónima podía denunciar con cualquier excusa a otra y esta debía demostrar su inocencia ante el Santo Tribunal que tenía a su mano mil y un métodos más o menos brutales para obtener una confesión.
En los últimos días en Canarias hemos podido asistir a un episodio inquisitorial en las páginas de algunos medios de comunicación contra varias personas de Intersindical Canaria a los que se trata de vincular con ETA mediante argumentos más que peregrinos.
A estos compañeros utilizando fuentes que supuestamente vienen directamente del Ministerio del Interior español se les “acusa” de reunirse a dos militantes de Askapena, una organización de solidaridad internacionalista vasca que es absolutamente legal y que trabaja en diversos países en proyectos comunitarios, su único delito defender el derecho a la independencia de Euskadi y ejercer el derecho de reunión.
Que en un medio de comunicación saquen con nombres y apellidos a varios militantes sindicalistas y activistas sociales para vincularlos con ETA sin ningún tipo de argumentos es una maniobra que me causa una profunda repugnancia. El Gobierno Español demuestra una vez más nos da una prueba de la pasta que está hecho, da igual que sean del PSOE o del PP, ambos utilizan este tipo de “filtraciones” interesadamente para tratar de desprestigiar y criminalizar a cualquier colectivo molesto. Ahora le ha tocado a una de las organizaciones sindicales referentes en Canarias, organización que además es de carácter nacionalista y de izquierda.
Curiosamente siempre sacan este tipo de informaciones pseudo delictivas en momentos en los que de alguna manera se sienten amenazados, cuando no tienen más argumentos. Cuando Intersindical Canaria hace una apuesta cada vez más clara por la soberanía nacional para nuestra tierra y la movilización social contra la crisis capitalista.
No es una estrategia nueva por desgracia, en su momento no dudaron en poner en su diana a los compas del CSO Tamaragua en La Laguna con la publicación de media página cargada de disparates que pasaran a la antología del periodismo basura en Canarias. Les pasó lo mismo a la Asociación de Vecinos de Tinajo cuando abandonaron su pacto con el PSOE. Igual nos ocurrió demasiadas veces en Azarug (recuerdo esa portada de La Gaceta que decía “Jarrai en Tenerife”) o en el Sindicato de Estudiantes Canario cuando protagonizamos las grandes movilizaciones estudiantiles de 2001, incluso se han lanzado este tipo de acusaciones contra dirigentes sindicales de la policía local de La Laguna.
Siempre utilizan la misma técnica, en un informe misterioso y “secreto” se dan datos personales, lugares y fechas, aunque curiosamente aquellos que tomaron los datos de estos peligrosos “desviados sociales” parece que nunca se preocupan demasiado en intervenir, ni tan siquiera en pedirles el DNI, siempre son viejos y molestos conocidos. Jamás hay intervenciones judiciales o policiales, el único testigo que queda es el papel del periódico o la noticia de un telediario, aunque siempre quedan listas para ser cargadas y disparadas en el momento más oportuno, cuando alguno se ponga revoltoso.
La verdad que me he sentido muy identificado con estos compañeros que han sido juzgados públicamente sin derecho a réplica, señalados sin pruebas por el mero hecho de hablar con otros militantes de izquierda de otro pueblo en lucha, por tener unas ideas que aunque supuestamente son respetadas por la ley son objeto de sospecha y de ataque fascista.
Tengo unas enormes ganas de que por fin ETA se decida por el abandono de las armas, que algún día dejen de ser la escusa barata para criminalizar a organizaciones, ese día algunos se van a quedar con demasiadas páginas de periódico en blanco, incluso algunos grandes partidos perderán su razón de ser y existir.
Por desgracia parece que lo que quieren es vernos vestidos de naranja y con una bolsa negra en la cabeza, sin derecho a hablar, a pensar o a defendernos. Al igual que los que ocupan las celdas de Guantánamo nos catalogan a todos y todas los que pensamos diferente como enemigos del progreso, terroristas sociales, pagados por el oro canarión, violentos, cualquier excusa es buena. Es su reacción ante el miedo que les provoca que existan personas generosas que actúan voluntariamente por mejorar esta tierra, por transformarla y hacerla mejor, personas que no pueden ser compradas o amenazadas con métodos más sutiles.
Tengo confianza en que nuestro pueblo sea capaz de ver la mano manipuladora que se esconde cobarde en el papel que aguanta todo. Ojala que muchas voces amigas y solidarias se alcen para ayudar a unos militantes de izquierda que aunque no los conozco personalmente espero que sepan que cuentan con todo mi apoyo y solidaridad.
Rubens Ascanio Gómez
Miembro de Alternativa Sí se puede por Tenerife