Muchas veces he reflexionado sobre esta actitud, lo he discutido con los protagonistas y he llegado a la conclusión que las únicas razones para este comportamiento es porque , para los de más avanzada edad, en un momento de vida, conocieron, siquiera fugazmente, el único gobierno democrático existente en el Estado Español, que dio justicia, pan y escuela para todos coincidiendo con un momento de esplendor cultural y artístico nunca repetido. Creo que esta vivencia tuvo que darle el impulso vital necesario para el resto de sus días. Otros, no tan viejos, conocieron durante largo tiempo organizaciones políticas fuertes y unitarias de izquierda que hicieron frente al sistema más inhumano jamás concebido.
Recurro a estas historias para, sin retórica, decirles que las claves del futuro para nuestra tierra están en los fardos de la experiencia de estos luchadores. En primer lugar la participación decidida, a pesar de los pesares, en la democracia y en segundo lugar la unidad de las fuerzas progresistas y de izquierda. La primera tiene su cita ineludible el próximo 27 de mayo y la segunda, inacabada, tiene un tiempo que en Tenerife ya se ha iniciado.
Los acontecimientos que se han sucedido en los últimos años en nuestra isla, la respuesta social contra el modelo de desarrollo diseñada por los constructores, concretado en la lucha contra el Puerto de Granadilla, han removido los cimientos de la política insular, incluyendo, afortunadamente, a las organizaciones y militantes de izquierda. La nueva aportación entusiasta y decidida de los nuevos movimientos sociales, fundamentalmente ecologistas, así como la experiencia de los movimientos de mayor tradición, como sindicalistas y vecinales, no ha dejado inmune a nadie y ha tocado a todos.
La izquierda más reflexiva, milite en el partido político que sea, ha entendido el mensaje y es consciente que las cosas no pueden continuar como hace unos años, sabiendo que las claves para futuras victorias están íntimamente relacionadas con una renovación en profundidad de la izquierda, que abarque un cambio en los métodos jerárquicos de participación de las organizaciones políticas y en la búsqueda real de nuevas convergencias con los sectores más avanzados de nuestra sociedad. Este nuevo escenario nos llevará, seguro, a un nuevo modelo de participación política que nos situara más allá de las limitadas fronteras actuales de los partidos.
Es mi convicción de ecologista, de hombre de izquierdas y de santacrucero que espera saludar tanto he ap el próximo domingo a los viejos de los querendido.
Pedro Fdez. Arcila (Candidato a la alcaldía de Santa Cruz)