
El pasado día 19 de julio durante la celebración del baile de magos de las fiestas patronales de este popular barrio candelariero, algunos vecinos/as se asomaron a sus ventanas alarmados por los gritos que se oían desde fuera, para presenciar como dos policías locales propinaban una brutal paliza a un menor que pedía un médico bajo una lluvia de golpes.
Sí a esto sumamos los continuos cacheos a los que someten estos miembros a menores y que son totalmente ilegales, la policía local se está tomando unas “libertades” propias de tiempos pasados y que parece difícil concebir en los años en los que actualmente vivimos y en una democracia.
La formación de izquierdas espera que estos hechos no queden impunes y que el alcalde de Candelaria, D. Gumersindo García, tome las medidas oportunas para que actitudes tan vergonzosas no vuelvan a suceder y que la policía local de este municipio trabaje para servir al ciudadano y no para generar desconfianza.